Asakusa en Tokio

Por: Eva del Amo

Uno de los distritos con más tradición de Tokio es Asakusa, donde los avances tecnológicos de occidente se combinan con la magia del tradicionalismo oriental, representado por numerosos templos y gente vestida con atuendos más propios de hace varios siglos.

Asakusa en Tokio

El lugar más visitado del barrio es el templo Sensoji, el más antiguo, venerado e importante de todo Tokio. Se llega a él tras atravesar el bullicio de la calle Nakamise Dori. Para ingresar en el templo propiamente dicho lo primero que hay que hacer es atravesar la excepcional y grandiosa puerta de Kaminarimon, con una gigantesca linterna de casi cinco metros colgando de ella.

El templo, situado al final del recinto, es una curiosa construcción, de aspecto tradicional, con una pagoda de 55 metros de altura. Su sala principal fue reconstruida tras finalizar la Segunda Guerra Mundial.

Tras visitar el templo podemos continuar nuestro recorrido por la calle Kappabashi Dugugai. Se llega a ella abandonando el recinto del templo por la parte izquierda de los jardines que lo rodean. Tan sólo habrá que caminar unos 250 metros hasta llegar a la calle. Aquí se encuentran las pequeñas tiendas que suministran a los restaurantes de la ciudad los platos de cera que sitúan en vitrinas justo a la entrada del local. Se trata de reproducciones muy realistas de las especialidades del restaurante. Muchos turistas las compran como suvenir.

Lo mejor del barrio de Asakusa, una vez se ha visitado el centro, es callejear sin rumbo, observando las curiosidades de las tiendas que encontraremos a nuestro paso. Un aspecto más del Tokio más tradicional, muy ajeno a los grandes rascacielos y los neones.

Cómo llegar a Asakusa:

La forma más rápida para llegar a Sakusa es utilizando el metro (líneas A y G). Hay que bajarse en la parada Asakusa.

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